Julián Marías, un ilustre pensador
Recientemente he tenido la oportunidad de leer el libro “Filosofía para desencantados” del filosofo Leonardo Da Jandra editado por la editorial Atalanta.
No me importa reconocer que desconocía la obra de este autor hasta llegar a mis manos este interesante e intenso ensayo filosófico.
Mi desconocimiento me obligo a buscar más información en la red global, sobre la biografía del autor. Destaco positivamente su compromiso vital con una concepción de la Filosofía aplicada a desvelar con rigor y sentido crítico el largo camino del entendimiento y el fin último del saber y la verdad.
No es mi intención el realizar una crítica a su obra, ni siquiera a este volumen “Filosofía para desencantados” Pero si remarcar que no me siento en absoluto desencantado; me siento pasmado y abochornado de la sociedad en la que la falta de ética y memoria del pasado, nos aboca a tiempos oscuros y crisis.
Mi sentido de la realidad, enfundado en toda suerte de limitaciones e ignorancia me impiden alcanzar, en muchas facetas del vivir, la necesaria objetivad, pero creo que la dimensión humana, tiene medios y herramientas ,para paso a paso, salir del circulo condenatorio de los prejuicios e ignorancia.
Bien venidas sean todas las reflexiones y conclusiones (acertadas o equivocadas) pues todas nos permiten seguir en el largo desarrollo del Logos.
En mis pesquisas sobre Leonardo Da Jandra encontré una entrevista publicada en el diario “El País” el lunes 2 de julio del 2007. En ella desarrolla sus vivencias y los acontecimientos tumultuosos con su padre y su desafección del mundo académico, en dicha entrevista me sorprendió y sonrojo una afirmación rotunda que cito literal de la entrevista:
ENTREVISTA: LEONARDO DA JANDRA
Extracto:
” me pasaba el tiempo en la Facultad de Filosofía, donde asistí a clases de uno de los peores filósofos que ha habido, y el peor discípulo de Ortega y Gasset, Julián Marías».
No entiendo las razones que tiene Leonardo Da Jandra, para hacer dicha aseveración, que objetivamente, no tienen ninguna base sobre la figura de Julián Marías.
Precisar en primer lugar que Julián Marías nunca dio clases de Filosofía en ninguna universidad Española, atendiendo a su biografía académica, destacar que fue represaliado en el mundo académico y cultural y en los círculos del poder imperante franquistas, por su condición republicana y critica.
En segundo lugar negar su segunda calificación, de” ser el peor discípulo” del autor del “El espectador”.
- No soy un intelectual ni me tengo por un experto en la extensísima obra de Julián Marías, pero si he podido conocer y aprender de algunas de sus obras y artículos:
- “La felicidad humana”, Alianza, Madrid 1989,
- Acerca de Ortega, Espasa Calpe, Madrid, 1991.
- El oficio del pensamiento, Biblioteca Nueva, Madrid 1958
- Tratado de lo mejor.
- La moral y las formas de la vida, Alianza Editorial, Madrid 1995
Así como de múltiples artículos de prensa y revista de occidente. No creo que se pueda encontrar más intensa y esforzada labor divulgativa y ensayística de la obra de Ortega y Gasset.
La descalificación de Leonardo Da Jandra, sobre Julián Marías no se corresponde con lo que en mi opinión se espera de un pensador ilustrado, se echa de menos, una explicación argumentada para aseverar y descalificar la figura y obra de un hombre que dedico su vida al noble arte y tarea de filosofar, obviamente sujeto a sus circunstancias históricas, por ello; falta objetividad en sus palabras y la modestia y nobleza intelectual ,sine cua non, en el filosofo y autor Leonardo Da Jandra.
En su libro “Filosofía para desencantados” escribe en la pág. 59 “La derrota del humanismo es indisociable del egocentrismo en su expresión más naturalista: la soberbia.
Ahí está la clave, en mi opinión, de sus desafortunadas palabras. Sería de agradecer un ensayo de Leonardo Da Jandra, sobre la obra de Julián Marías y así poder expresar con argumentos y datos, las razones por las que descalifica tan alegremente la trayectoria intelectual del que , a su pesar, fue y será “UN ILUSTRE PENSADOR”
Julián Marías, Leonardo Da Jandra
Una objetiva y elegante crítica de la que no luego estar más en sintonía, a una afirmación sin fundamento y sin ningún ápice de objetividad hacia el Sr. Marías. Por parte de este autor.
Deseosa de poder leer la posible réplica.